En el ámbito del 17º Seminario de capellanes y trabajadores de pastoral de la aviación civil, que actualmente se está llevando a cabo en Roma, los participantes, aproximadamente 90, visitaron ayer por la tarde el aeropuerto Leonardo Da Vinci en Fiumicino.
La visita, organizada por el capellán del aeropuerto, Don Giovanni Soccorsi, comenzó con el descubrimiento de una casa de reinserción social para personas en una condición de fragilidad, incorporada en la parroquia de Santa Maria degli Angeli, en el aeropuerto. La casa puede alojar hasta 8 personas a la vez y en estos años, ha ayudado a docenas de personas con necesidad, obligadas a vivir en el aeropuerto por varias razones. Vagabundos, inmigrantes indocumentados, marginados con problemas de relación con los demás y problemas mentales: personas a quienes la capellanía del aeropuerto ofrece apoyo temporal con el objetivo de darles esperanza para el futuro.
La experiencia del servicio a la caridad es compartida por Aeroporti di Roma - ADR, por su Director General, el doc. Ugo De Carolis, y por el Ing. Ruggero Poli, que es el jefe de ADR Group Energy Systems, de la Caritas diocesana y de Mons. Gino Reali, Obispo de la diócesis de Porto-Santa Rufina, del cual forma parte el municipio de Fiumicino.
Después de la visita a la casa de recepción y un saludo de las autoridades aeroportuarias presentes, el grupo se dirigió a la capilla del Terminal 3, cuya puerta principal fue la única Puerta Santa de un aeropuerto, abierta durante el Jubileo de la Misericordia.
Al final de la tarde en el aeropuerto, el Card. Peter K.A. Turkson celebró la Santa Misa en la parroquia del aeropuerto y bendijo el nuevo tabernáculo de la iglesia construida en el año 1962. El coro de Alitalia, animó la celebración, y puede ser considerado como testimonio directo de como la pastoral del aeropuerto actúa no solo con los pasajeros, sino también con aquellos que trabajan diariamente en los espacios del aeropuerto.
El aeropuerto es un lugar de encuentro con Dios, como recordó el Santo Padre Francisco durante la Audiencia que otorgó a los participantes, y el cuidado y la atención hacia las historias personales de cada persona, junto con la ayuda material ofrecida a quienes tienen dificultades, son los pilares de la actividad pastoral del aeropuerto romano, que se presentó a los participantes en el Seminario internacional como una práctica ejemplar que debe ser imitada y actuada en los varios aeropuertos del mundo.