El Dicasterio se reunió el miércoles 14 de julio por videoconferencia con representantes de la Conferencia Episcopal Brasileña (CNBB) en relación con la emergencia sanitaria causada por el COVID-19.
Mons. Joel Portella Amado, Obispo Auxiliar de Río de Janeiro y Secretario de la CNBB, ofreció una visión general de la situación de la pandemia en el país, uno de los más afectados del mundo.
El Card. Odilo Pedro Scherer, Arzobispo de São Paulo, habló sobre los problemas de salud que enfrenta su ciudad, y Mons. Leonardo Steiner, Arzobispo de Manaus, sobre los problemas relacionados con los pueblos indígenas y el Amazonas.
Mientras que Mons. Roberto Francisco Ferreria Paz, Obispo de Campos y responsable del ministerio de salud de la CNBB, y Mons. Paulo Celso Dias Do Nascimento, Obispo auxiliar de Río de Janeiro y responsable del ministerio de salud de la misma ciudad, abordaron el trabajo de los médicos y trabajadores de la salud, así como de los hospitales y el sistema de salud comprometidos en la lucha contra la emergencia.
Durante el encuentro - después de un diálogo sobre la dimensión sanitaria del fenómeno y sobre las consecuencias económicas que está teniendo y tendrá todavía sobre la población - se destacó el compromiso de la Iglesia local para ayudar a quienes viven en situaciones de sufrimiento, especialmente a los enfermos, a los pobres y a los nuevos desempleados a causa de la crisis. Las estructuras de la Iglesia, en este sentido, han promovido inmediatamente entre los fieles las medidas de seguridad y alejamiento previstas; pero sobre todo han aumentado su propio servicio de caridad, demostrando también creatividad pastoral. Se han fortalecido los servicios relacionados con la distribución de alimentos y la escucha de las personas con los instrumentos que ofrecen las tecnologías digitales.
A continuación, los Obispos presentaron algunos programas y proyectos elaborados para situaciones particulares, como la asistencia a las poblaciones nómadas y a los migrantes venezolanos presentes en el país; o la utilización de las emisoras de radio católicas y otras emisoras que se han puesto a disposición para contar historias personales, ofrecer una orientación constante para la prevención del virus y proponer celebraciones litúrgicas y momentos de oración.
En el curso de la reunión con la CNBB, surgieron los problemas relacionados con el sustento económico que la Iglesia también podrá afrontar en la persistencia de una situación de dificultad.
Por parte del Dicasterio participaron el Card. Peter K.A. Turkson, Prefecto, Mons. Bruno Marie Duffé, Secretario, y el P. Augusto Zampini, Secretario Adjunto, además de los funcionarios del Área a cargo del ministerio de salud. Card. Turkson y Mons. Duffé subrayaron el compromiso del Dicasterio y de la Santa Sede a través de la Comisión Vaticana para COVID-19, creada por el Papa, en particular en la promoción de medidas para la protección de la vida y de iniciativas caritativas y de solidaridad; ademàs de en la reflexion y el análisis que puedan ser útiles para mejorar el sistema político, económico y social. Es decir, como ha pedido el Papa Francisco, papa "preparar el futuro".
(foto en la pequeña caja tomada de Ansa.it)