La publicación contiene el programa y las actas del Congreso promovido por el Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud (a partir de agosto de 2016 confluyó en el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral) sobre el tema “La mujer consagrada en el mundo de la Salud, en el umbral del tercer milenio”, celebrado del 1 al 3 de octubre de 1998 en el Aula del Sínodo, Ciudad del Vaticano.
La colección se abre con el discurso pronunciado por el Papa San Juan Pablo II a las enfermeras religiosas que participaron en el Congreso y que fueron recibidas en audiencia, en la Sala Clementina del Vaticano, el 1 de octubre.
“La primera tarea de vuestra vida consagrada en la gozosa y atractiva experiencia de Cristo - se lee en el texto - sigue siendo la de recordar al pueblo de Dios y al mundo el rostro misericordioso del Señor. En efecto, la fuerza de vuestro carisma, antes que en las obras y en los objetivos de servicio, debe brillar en una novedad de vida, en la que se reproduzcan los rasgos característicos de Jesús”.
Y sigue: “Toda vuestra vida de consagradas - es la exhortación del Santo Padre - deberá estar impregnada de la amistad con Dios, para poder ser el corazón y las manos de Cristo con los enfermos, manifestando en vosotras la fe que os lleva a reconocer en los enfermos al Señor mismo y que se convierte en fuente de la que fluye vuestra espiritualidad”.